En la jornada de espiritualidad, estuvimos acompañadas por monseñor Claude Rault y el sacerdote Andrea Mandonico, de Italia.
Viviers 2.019
2ª Conferencia
2ª Conferencia
CARITAS. FRATERNIDAD UNIVERSAL
«Mi
apostolado debe ser el apostolado de la bondad» (CdF)
«Les
aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aun por el
más pequeño, lo hicieron por mí» (Mt 25,40)
1-
La experiencia de la vida del Hermano Carlos.
*El
amor herido de su infancia y juventud. La pérdida de la fe.
*Los
primeros signos de un despertar y de una salida de sí.
*El
regreso de la fe y el ardor del Amor por Dios.
«Tan
pronto como creí que había un Dios, comprendí que no podía hacer
otra cosa sino vivir para Él»
«[…]
el Evangelio me muestra que el “primer mandamiento es amar a Dios
de todo corazón”, y que era preciso encerrarlo todo en el amor»
(Carta
a Henri de Catries, Carlos de Foucauld, 14
de agosto 1901)
«Ahora son las siete menos cinco
de la tarde en París – escribe a su prima diez años más tarde –
hace diez años, estaba sentado cerca de ti, en tu salón, mirando
unas veces a ti, otras veces al reloj de péndulo. Cómo me parece
vivo aquel día.»
*Del
Amor de Dios al Amor por el otro.
*Del
Amor dado al Amor recibido.
2-Algunos
escritos del Hermano Carlos sobre el Amor-Caridad de Dios.
*La toma de consciencia que Dios le
ama.
La Caridad no es primero un asunto de
sentimiento, pero para él es a la vez el don de Dios y la voluntad
de recibir este don:
"El amor
consiste no en sentir que se ama sino en querer amar: cuando se
quiere amar, se ama: cuando se quiere amar por encima de todo, se ama
por encima de todo. Si ocurre que se cae en una tentación, es que el
amor es demasiado débil, no es que no haya amor: hay que llorar como
san Pedro, arrepentirse como san Pedro, humillarse como él, como él
también decir tres veces: «yo os amo, os amo, vos sabéis que a
pesar de mis debilidades y pecados, os amo». (carta
a Luis Massignon, Tamanrasset, 15 de julio de 1916)
En cuanto al
amor que Jesús nos tiene, nos lo ha probado suficientemente como
para que creamos en él sin sentirlo: sentir que le amamos y que nos
ama, sería el cielo; el cielo no es, salvo raros momentos y raras
excepciones, para aquí abajo”.(Meditaciones
sobre la Escritura, 1896-1900. Cf. C. de Foucauld, Obras
Espirituales. Antología de textos, Madrid 1988, 224-225)
Esta Caridad incluye a todos los
hombres y mujeres de la tierra reconocidos como «hijos de Dios», lo
que no es común en la visión teológica de su tiempo:
«...Todos los
hombres son hijos de Dios que les ama infinitamente:es entonces
imposible querer amar a Dios sin amar a los seres humanos: cuanto más
se ama a Dios, más se ama a los hombres: el último mandamiento de
Nuestro Señor Jesús Cristo, algunas horas ante de su muerte fue:
«que
se amen los unos a los otros. Ustedes deben amarse unos a otros como
yo los he amado.35
En
esto reconocerán todos que son mis discípulos, en que se amen unos
a otros.»
El amor
de Dios, el amor por los seres humanos, es toda mi vida, será toda
mi vida,
así lo espero.
(Carta a Louis Massignon, Tamanrasset, 15 de julio 1916)
*El
apostolado de la bondad.
Saca conclusiones del Amor que
recibe. Debe ser bueno como Dios es bueno, y enseñar que Dios es
bueno a través de toda su vida. Como no puede predicar, su vida será
el testimonio del Dios bueno que ama a toda la humanidad:
“Mi
apostolado tiene que ser el apostolado de la bondad. Viéndome tienen
que decirse: «Puesto que este hombre es tan bueno, su religión debe
ser buena». Y si me preguntan por qué soy manso y bueno, debo
decir: porque soy el servidor de alguien que es más bueno que yo.
¡Si supieran que bueno es mi maestro Jesús!…»
Está bondad está dirigida hacia
todas las personas sin exclusión, pero según el Evangelio, con
especial predilección hacia los pobres:
«Seamos buenos con todo el mundo,
pero tengamos esta bondad especial que se llama “misericordia”;
todo y siendo buenos con todos, ocupémonos mucho más de aquellos
que están necesitados: necesidades en el alma a causa de los
pecados, necesidades en el corazón para los desdichados, necesidades
en el corazón y en el cuerpo para los pobres y los enfermos, todas
las necesidades de los niños y los ancianos ya que ellos suelen
reunir de habitualmente, todo tipo de necesidades.»
En una
carta dirigida a Joseph Hours, uno de sus amigos, expone algunos
principios de base válidos para todo cristiano deseoso de seguir las
huellas de Jesús:
«-Todo
cristiano debe ser apóstol, es un deber estricto de caridad.
-Todo
cristiano debe mirar al ser humano como a un hermano querido; si es
pecador, enemigo de Dios, es un hermano enfermo, muy enfermo; hay que
sentir por él una profunda piedad y prodigarle cuidados fraternales
como a un hermano insensato... Los no cristianos pueden ser enemigos
de un cristiano, pero un cristiano es siempre un tierno amigo de un
ser humano; sentir hacia
el ser humano los sentimientos del Corazón de Jesús.
-
Ser caritativo, afable, humilde con todos los hombres: es lo que
hemos aprendido de JESÚS. No ser militante con nadie: "Jesús
nos ha enseñado a ir "como corderos en medio de lobos", y
no a hablar con aspereza, con rudeza, ni a injuriar ni a tomar las
armas.
"Ser
todo para todos para darlos todos a JESÚS" teniendo para con
todos bondad y afecto fraterno, ofreciendo todos los servicios
posibles, manteniendo un contacto afectuoso, siendo un hermano tierno
para todos, para conducir lentamente las almas a Jesús con la
práctica de la bondad de JESÚS.» (Correspondencia inédita del
Padre de Foucauld con Sr. Joseph Hours)
*El
amor del pobre reconocido como Jesús él-mismo.
Aquí tocamos una de las claves de su
vida. Hizo realidad la pobreza de Jesús en Nazaret. Jesús que vivió
en la pobreza y que la beatificó en un sermón sobre la montaña.
Este amor por los pobres culmina en la
parábola de Último juicio:
Creo
que no hay una frase del Evangelio que me haya causado una impresión
más profunda y haya transformado más mi vida, que ésta: “Todo lo
que hagáis a uno de estos pequeños, a mí me lo hacéis”. Si
pensamos que son palabras de la Verdad increada, la de la boca que ha
dicho: “Esto es mi cuerpo… esta es mi sangre”, con qué fuerza
somos empujados a buscar y a amar a JESÚS en “esos pequeños”,
esos pecadores, esos pobres, aportando todos los medios materiales
para aliviar sus miserias temporales. (Carta a Louis Massignon,
Tamanrasset, 1ero de agosto 1916)
Vuelve a menudo sobre esta Palabra de
Jesús capaz de transformar la cara de nuestro mundo:
«Les
aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aun por el
más pequeño, lo hicieron por mí (Mt 25,40).
Tengamos fe en estas palabras y
nuestra vida se transformará…
No hay palabra en el Evangelio
capaz de cambiar toda la existencia como aquella. Nos deja ver todo
desde una nueva perspectiva. Los hombres ya no son solamente nuestros
hermanos, son el mismo Jesús.
Todo lo que hacemos por ellos, lo
hacemos por Jesús: Vemos a Jesús en todo»
Dios mío, como lo sabes, es con
esta palabra que me has hecho ya mucho bien, Haz que la reciba con
una fe cada vez más viva y haz que transforme completamente mi vida,
mi alma, mi corazón, mi vida interior, mi vida exterior, y que me
haga tal como quieras. Amen. (Meditaciones en Nazaret)
3-
¿A qué nos invita esto? Algunas pistas para seguir sus huellas
Para ir más lejos en vuestra
oración y reflexión, os dejo algunas pistas.
-Reflexión personal.
¿Qué provoca en mi este encuentro,
este descubrimiento del Amor – Caritas en la vida del Hermano
Carlos?
¿Ya sentí alguna vez la certeza de
que Jesús me ama? A través de qué eventos importantes de mi vida
lo pude experimentar?
Tiene una incidencia mi Amor por Dios
en mi Amor por los demás? Empezando por los cercanos, aquellos y
aquellas que forman parte de mi entorno inmediato, de mi existencia?
¿Sentí o siento la dependencia, un
poco a la manera del Hermano Carlos salvado por los Tuaregs: Qué es
lo que me habita en estas circunstancias?
Repaso mis relaciones y me pregunto
sobre lo aquello que tengo que vivir más bajo esta luz del Amor de
Dios.
-Reflexiones e intercambios en
grupos
El
Hermano Carlos insiste mucho en el compromiso del Amor.
Tenemos, en la Iglesia y alrededor de
nosotros, numerosas maneras para manifestar este compromiso del amor
fraternal. Existen también otros lugares donde podemos manifestar la
Caridad del Cristo.
¿Como hacer más efectiva la
manifestación de esta Caridad?
¿Hemos entendido lo que significa en
nuestra Sociedad «el apostolado de la bondad»?
¿Qué urgencia vemos para nuestro
tiempo como testimonio del Amor de Dios por los más expuestos de
nuestro mundo?
-Algunas
referencias sobre el Amor – Caritas en el Nuevo Testamento…
La cumbre de la «Caritas»:
Amor de los pequeños, Amor por el
mismo Jesús:
Mt 25.